Hoy quiero contarles una historia que muchos de ustedes por lo menos en fotos conoce y que ha tenido un final feliz.
Aisha Bibi, una joven afgana de 18 años, se hizo famosa en el mundo gracias a las fotos que la revista Time, saco en portada y que fue hecha por el fotógrafo de Sud África Jodi Bieber, con la que gano el primer premio del concurso mundial de fotografía de prensa del 2011.
Esta niña de la provincia de Oozogan en Afganistán, fue entregada junto a su hermana menor a un guerrero talibán para saldar una "deuda de sangre", después de que un tío de las muchachas asesinara a un familiar del líder religioso. Años después, Aisha se casó con el talibán, quien la mantenía encerrada en un establo. Utilizaba a ella y a su hermana como esclavas y las azotadas frecuentemente para castigar el crimen de su tío. Aisha escapó, pero el año pasado su esposo la encontró en Kandahar, la llevó de vuelta a casa y en cumplimiento de la orden de un juez talibán le cortó las orejas y la nariz. Según la cultura pashtun cuando un marido es avergonzado por su esposa es como si perdiera la nariz, por lo que se impone un castigo ejemplar
Ella conto así los dramáticos episodios a la CNN: “Cuando me cortaron la nariz y los oídos me desmayé. En medio de la noche se sentía como si hubiera agua fría en la nariz. Abrí mis ojos y yo ni siquiera podía verme por toda la sangre ¨.
Luego , cuando terminaron de hacer su hazaña la abandonaron en las montañas, dejándola como muerta, así lo creyeron….cuando se vio sola y arrastrándose, pudo llegar hasta casa de su abuelo, este junto con el padre de la chica lograron trasladarla a un centro medico estadounidense, donde estuvo durante diez semanas, cuando estaba mejor la trasladaron a un refugio secreto de acogida de mujeres de Kabul, todo esto con un gran secreto para que la familia del esposo no se pudiera enterar, ya en agosto fue trasladada a los EE.UU. por la Grossman Burn Foundation.
Cuando la vio Rebecca Gray Grossman, presidenta de la Fundación de Quemaduras Grossman, dijo que Aisha era una de las miles de mujeres que son tratadas con dureza terrible
Siendo sometida a una operación de cirugía reconstructiva. La cirugía ha sido donada por el cirujano plástico y reconstructivo, Peter Grossman y el equipo del centro The Grossman Burn ubicado en el Hospital West Hills en Los Ángeles
Ahora tiene una prótesis de nariz, que la pusieron en el Centro de Quemaduras Grossman en California, como parte de su rehabilitación de ocho meses
Esta es una historia de lo que le ocurre a esas pobres mujeres en países donde sus derechos no existen, luchemos para que todo esto cambie y se acabe el maltrato del ser humano, sea del país que sea y con las costumbres que puedan tener, las personas, se merecen todo el respeto del mundo, nacieron para ser libres y dueñas de sus actos, esperemos que sea así y se acabe de una vez con tanto sufrimiento y muertes.
Aisha ahora es feliz, su historia ha terminado felizmente y tiene un futuro por delante………………Aisha Bibi vive hoy en los EE UU
maimenes
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